En información publicada por la Oficina Opypa del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), se informa que los puestos de trabajo de la fase primaria agropecuaria se estimaron en unos 140.000 en 2019. Esto es, alrededor de 20.000 menos respecto a 2014, cuando se registró el máximo de ocupación en la economía. Estas estimaciones surgen del procesamiento de las Encuestas Continuas de Hogares del INE del 2006 al 2019.

El informe técnico en el que se analiza la evolución del trabajo en el medio rural, de autoría de María Noel Ackermann y Ángela Cortelezzi, se titula “Empleo en el sector agropecuario: situación 2019 a partir de las Encuestas Continuas de Hogarese impactos preliminares del COVID-19”.

Según concluye la investigación, en el Uruguay los puestos de trabajo de la fase primaria agropecuaria se estimaron en unos 140.000 en 2019, esto es, alrededor de 20.000 menos respecto a 2014, cuando se registró el máximo de ocupación en la economía. Estas estimaciones surgen del procesamiento de las Encuestas Continuas de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) del 2006 al 2019.

Al desagregar por rubros agropecuarios, se observa una caída generalizada de la ocupación en el período 2014-2019. Se destaca la caída del empleo en los servicios agrícolas y ganaderos en predios. En tanto, la forestación mantiene sus niveles de ocupación. El carácter intensivo en el uso de la mano de obra ubica a la hortifruticultura en el segundo lugar en cuanto a participación en el total de ocupados del sector agropecuario, detrás de la ganadería vacuna.

A comienzos de 2020, la emergencia sanitaria por COVID-19 generó una caída de la actividad económica que se reflejó a su vez en un aumento significativo de los beneficiarios de subsidios de desempleo. En este contexto, el sector agropecuario se ha visto afectado en menor medida en comparación con otros sectores.

El ingreso medio líquido por trabajo de los ocupados en el sector agropecuario (asalariados, trabajadores por cuenta propia, patrones) por concepto de actividad principal promedió 32 mil pesos por mes en 2019 (159 pesos la hora), con un crecimiento real (por encima de la inflación) de 4,3% promedio por año entre 2006 y 2019, lo que se encuentra alineado con lo observado para el promedio de la economía (4,6%). Durante 2019 la cotización la moneda en el país se situó entre unos 33 pesos por dólar en enero, evolucionando al alza a lo largo del período, hasta alcanzar 37 pesos por dólar en diciembre.

Al desagregar por categorías de ocupación se constatan diferencias sustanciales en los niveles y evolución de los ingresos de los asalariados, cuentapropistas (categoría asimilable a los productores familiares) y patrones. Del análisis de las distintas encuestas se concluye que los productores familiares obtienen un ingreso menor al que perciben los asalariados.

A su vez, los ingresos de los asalariados del sector agropecuario registran crecimientos reales mayores respecto a otras categorías de ocupación y a otros sectores de actividad en el período 2006-2019, aunque los primeros parten de niveles más bajos en términos relativos. Esta evolución de los salarios estuvo determinada en parte por la instalación, a partir del año 2005, de los ámbitos de negociación colectiva tripartita para el sector rural.